Las viviendas adquiridas con hipotecas por vivienda habitual representan una caso de consulta relativamente frecuente. Cuando éstas llegan a alquilarse, existe la duda si se mantiene o se pierde la deducción otorgada para las hipotecas que corresponden a estos casos.
“La vivienda habitual se configura, por tanto, desde una perspectiva temporal que exige una residencia continuada durante, al menos, tres años. Esta residencia continuada supone una utilización efectiva y con carácter permanente por el propio contribuyente”. Por lo tanto en caso de que se deje la vivienda y se alquile, se perderá el derecho a la deducción, ya que la vivienda pierde la condición de vivienda habitual.
Declaración de la renta
El hecho de tener una hipoteca sobre la vivienda habitual, no significa que no se pueda alquilar, solo que deberá ser considerada la renta generada en la declaración de la renta y se perderá el derecho de la deducción.
En el caso de alquiler de la vivienda, se generarán rendimientos de capital inmobiliario. Las rentas obtenidas por dicho concepto, deberán ser tributadas.
Conclusiones
Si el contribuyente posee una vivienda habitual y la misma es alquilada, pierde los beneficios fiscales y será necesario incluir las rentas generadas en la declaración. El contribuyente puede revertir estas condiciones en caso de que vuelva habitar su vivienda. Debe cuidar el hecho de que será necesaria la residencia permanente por un mínimo de tres años, para considerarla habitual y solicitar la deducción correspondiente.
En caso de duda, es recomendable consultar con un asesor fiscal en Barcelona. Estos profesionales pueden ayudarte a entender las normas fiscales y a tomar las mejores decisiones para tu caso.
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