La jubilación es una prestación que otorga la Seguridad Social a todos los trabajadores, incluso a los autónomos. Este beneficio se puede solicitar cuando concluye la etapa laboral activa… pero ¿sabías que existen varios tipos de jubilación para autónomos?
Es bueno que conozcas también que hay factores que afectan tu jubilación y tu pensión, como, por ejemplo, darse de baja en verano.
Hay varias tipos de jubilación para autónomos y para cada una hay que cumplir diferentes requisitos. Si quieres conocerlas, continúa leyendo porque en este post te detallaremos cuáles son y qué se necesita para solicitarlas.
Jubilación contributiva
La jubilación contributiva es la compensación por la pérdida de ingresos debido al cese temporal o definitivo de la actividad laboral. La interrupción puede ser causada por incapacidad permanente o muerte del autónomo. Para optar a esta forma de retiro tienes que estar de alta en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA).
También es indispensable haber cumplido 65 años y haber cotizado en la Seguridad Social durante 36 años y seis meses. Sin embargo, este límite de edad puede extenderse a los 67 años, pero requiere que hayas cotizado por 38 años y seis meses.
Si no has cotizado durante el período establecido, entonces puedes solicitar la jubilación anticipada para autónomos. El requisito fundamental es que hayas cotizado como mínimo durante 15 años.
Jubilación no contributiva
Si llega el final de la actividad laboral y no has completado las cotizaciones para la jubilación contributiva, puedes recibir la jubilación no contributiva. Para disfrutar de esta es necesario que hayas cumplido 65 años y que hayas residido en el país como mínimo durante 10 años.
Jubilación activa
En caso de que el autónomo quiera retirarse y a su vez continuar con la actividad laboral puede solicitar la jubilación activa.
Para gozar de este modo de jubilación, debes tener la edad y las cotizaciones que determina la ley. Hay que destacar que si solicitas esta forma de retiro no podrás optar por la jubilación anticipada. Además, el trabajo que quieras desarrollar paralelamente con la jubilación deberás desempeñarlo en el sector privado, no importa si es a tiempo parcial o completo.
Jubilación anticipada
Para optar a la jubilación anticipada voluntaria para autónomos, las actividades laborales deben haber cesado por voluntad propia. El retiro no debe ser causado por un factor externo al trabajador. Debes tener 63 años de edad y haber cotizado como mínimo durante 35 años. Además tienes que haber cotizado por dos años en los 15 años anteriores a la solicitud de la jubilación.
Jubilación flexible
La jubilación flexible permite al autónomo ejercer durante su retiro uno o varios trabajos, pero a tiempo parcial. Es decir, con una dedicación de entre un 25% o 50% de la jornada laboral convencional. Esta jubilación facilita que continúes en el campo laboral, pero sólo si obtienes un contrato de trabajo parcial.
Con este formato de jubilación la pensión se ve afectada debido a que se reduce a causa del trabajo de tiempo parcial. Lo devengado en el nuevo empleo no debe superar el salario mínimo interprofesional anual.
No importa si quieres retirarte definitivamente o si eres de los que quieren seguir trabajando, tienes derecho a recibir cualquiera de estos tipos de jubilación para autónomos.
Lo que debes tener en cuenta es cuál de estas modalidades de jubilación es la que más te conviene, tanto para emprender nuevos proyectos como para tomar un merecido descanso. Es importante que determines con precisión qué es más beneficioso para ti.
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